Ya hace tiempo que la Provincia de España-Sur, impulsada por algunas Hermanas “soñadoras”, quería dar respuesta a una intuición innovadora desde la comunidad de Nuakchott, Mauritania.
Llegamos a la ciudad de Diurup del distrito de Fatick, en Senegal, el 31 de diciembre de 2020, (Foto N° 1), una comunidad internacional, formada de tres Hermanas: Sor María Jesús, Sor Georgette y Sor Francisca. Esta última se vio obligada a dejar la Misión un año después por motivos de salud.
En Febrero de 2022 se unió a nosotras una nueva Hermana, Sor Gloria, y juntas, intentamos continuar el sueño de nuestros Superiores, empeñadas en hacerlo realidad. (Foto N° 2)
Desde el comienzo, nuestro primer esfuerzo ha sido el de inculturarnos en la zona, la región, el país: conocimiento de la lengua, cultura y medios de vida.
Con la intención de comprometernos en servicios vicencianos, esto es, con los más pobres, demandados por los propios vecinos, hemos llevado a cabo un proceso de identificación tanto en el pueblo de Diurup como en las aldeas del entorno. Este proceso ha incluido reuniones en Diurup con distintos agentes sociales: Asociación de mujeres, Consejo parroquial y Ayuntamiento. Hemos visitado 19 aldeas, 3 de ellas muy cercanas y las otras 16 más alejadas. En cada aldea hemos tenido reuniones con los vecinos. Fueron convocados por el catequista y el líder local musulmán, con el afán de conseguir que se involucre toda la población; de este modo el proyecto puede llegar a todas las personas sin distinción de raza, sexo o religión.
Una vez a la semana las Hermanas y dos colaboradores salen a las diferentes comunidades a conocer y atender en lo posible a las familias.
En estas reuniones tuvimos la oportunidad de conocer la situación de cada familia, sus problemas, y ver la forma de dar solución a sus dificultades.
También comenzamos la visita a los enfermos del núcleo urbano; Sor Francisca, que en los comienzos se encontraba bien, acompañada de un catequista, que le ayudada en el tema de la traducción, fue conociendo los lugares donde habitan las personas afectadas de diversas patologías que generan una enfermedad crónica: tuberculosis ósea, enfermedades de la piel, fracturas, accidentes que han producido una hemiplejia, etc. Conocimos muchos enfermos afectados de accidentes cerebrovasculares debido a la hipertensión, pues la alimentación es muy rica en sal, especies y productos químicos, consumidas en gran cantidad por la población. Muchos de estos enfermos no tenían ninguna posibilidad de rehabilitación. Encontramos a muchos tirados en el suelo, sin ningún tipo de higiene y sin ningún conocimiento sobre la prevención de enfermedades.
En todos estos encuentros nos dimos cuenta de que una de las necesidades que más demandaban era la alfabetización de adultos. En algunas comunidades ya lo habían intentado, pero no había prosperado. Constatamos, además, que el analfabetismo se da de manera más frecuente en las comunidades de los alrededores de Diurup.
Esto justifica, por lo tanto, la necesidad de visitar estos pueblos y ofrecerles cuidados primarios y una formación a las mujeres en higiene y salud.
Una vez constatado todo esto, nos pusimos a elaborar un proyecto para pedir ayuda financiera, sobre todo, a través de Covide-Amve.
Gracias a Dios y al Cabildo de Canarias, el proyecto se ha podido comenzar.
La Parroquia nos había cedido una sala que había sido antiguamente la Iglesia Parroquial, y en ella hemos podido construir un pequeño Centro de Salud y una Sala de formación.
El 17 de Octubre de 2022 pudimos inaugurar el Centro “San Vicente de Paúl”. El párroco de Diurup nos acompañó y bendijo el lugar con la participación de un buen grupo de personas.
Y desde entonces, estamos sirviendo a los pobres en estos dos ámbitos de pobreza. Los enfermos acuden contentos de encontrar Hermanas acogedoras que intentan responder a sus necesidades de forma totalmente gratuita.
Tanto si encuentran solución a sus enfermedades como si no, siempre parten contentos de haber sido atendidos con cariño y disponibilidad. Además, pueden recibir sesiones de masajes, algo inconcebible para ellos, por su falta de recursos económicos.
Un grupo de monitores ha sido formado para impartir clases en seis comunidades de los alrededores de Diurup; actualmente, 180 mujeres y hombres están recibiendo formación en la lengua serer y en francés, así como en cálculo.
Otra pobreza que nos llama a dar respuesta son los niños sin escolarizar por falta de medios económicos. Ya hemos podido apadrinar a doce gracias a padrinos solidarios que se implican en su educación. A estos niños los recibimos una vez por semana para apoyarles en sus estudios.
Poco a poco estamos conociendo otro tipo de pobrezas que intentaremos ir dando respuestas según las posibilidades: Personas que viven en la calle, necesidad de Centros de Educacion Infantil….
“El amor es inventivo hasta el infinito” y este amor no nos falta. Ponemos en manos de la Virgen Milagrosa esta Misión, y damos gracias a Dios por tantas personas que nos están ayudando a que este sueño de la Provincia se haga realidad. De una manera especial a los Superiores que han hecho posible este sueño y han confiado en nosotras. Sentimos su apoyo aun en la distancia y nos ayudan continuamente a sentirnos parte de esta bella Provincia de España-Sur.