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Convocatoria Premios Voluntariado LARES

La Oficina de Voluntariado Lares  convocó, con motivo del Día Internacional del Voluntariado del próximo 5 de diciembre, dos modalidades de premios: al proyecto de voluntariado que se desarrolle en relación a los cuidados, y a la persona voluntaria destacando por las acciones realizadas o años de dedicación.

Los premios estaban dirigidos a entidades del tercer sector que tenían programas de voluntariado en el ámbito del cuidado.

Un año más se han celebrado los Premios de Voluntariado Lares para rendir homenaje a todas las personas que dedican su tiempo en acompañar a las personas que lo necesitan. Este año se han duplicado el número de candidaturas de Proyectos y Personas Voluntarias que han compartido su experiencia.

De entre los premiados se ha hecho una Mención especial Voluntaria Lares 2023 “Lucía Fernández Noguera” de la “Residencia Santa Luisa de Marillac” (Cuevas de Almanzora, Almería)

Lucia es una joven voluntaria de 12 años de edad que lleva 2 años yendo voluntaria en la Residencia Santa Luisa de Marillac, junto con otras 9 jóvenes de la localidad.

En la Residencia Santa Luisa de Marillac se tiene la suerte de contar con Personas Voluntarias que participan en actividades junto a las Personas Mayores que tienen su hogar en nuestra Residencia.

La Residencia Santa Luisa de Marillac, solo tenemos palabras de agradecimiento hacia Lucia y hacia todo el personal voluntario.

Testimonio de Lucía:

Hola, soy Lucía, tengo 12 años y vivo en Cuevas del Almanzora. Este es mi segundo año siendo voluntaria en la Residencia de Santa Luisa de Marillac, y mi experiencia empezó así: Yo, antes, tenía a mi abuela materna en la Residencia, y conocí a algunos abuelos que están aún allí y otros que ya no están, pero se han quedado en mi recuerdo. Conocí a algunas trabajadoras y a las Hermanas que habitualmente siguen estando.

Me encanta pasar el tiempo con ellos, pero lo que más me gusta es pintarle las uñas, hacer manualidades, darles la comida, ver películas, ir a visitar el Castillo, hacer funciones de teatro con ellos, sacarlos a pasear un rato y ayudarlos en lo que necesiten.

El invierno pasado, la Residencia organizó una obra de teatro de Navidad con las voluntarias y los abuelos. Nos teníamos que aprender unos guiones, y en los ensayos nos pegábamos risas infinitas, porque tanto las voluntarias como los abuelos noa inventábamos algunas de las palabras que teníamos que decir.

Ser voluntaria te enseña a ver la vida de otra manera. Hay algunos abuelos que están malos y es una situación difícil que mucha gente no entiende y entonces nos ayuda a ver la situación de los demás y muchas cosas más.  Estar con ellos también es un aprendizaje:  hay abuelos que están solos porque no tienen familiares cerca y el estar con nosotras les da vida, aprovechan para contarnos historias de cuando ellos eran jóvenes. El día de Navidad hacemos muchas cosas. Los abuelos reciben la visita de  los Reyes Magos. También hacemos manualidades de Navidad.

En definitiva, hacemos muchas cosas, tenemos momentos buenos, y momentos malos  cuando fallecen algunos abuelos.

Ser voluntaria es una experiencia única en la vida que nunca vamos a olvidar: haces amigos nuevos y convivimos entre nosotros a la vez que con los abuelos.

Lo que yo siento yendo allí es alegría, pues cada día ellos me hacen ir con más ganas porque  cada día hacemos algo divertido o nos enseñan algo nuevo.

Me siento orgullosa de poder formar parte de esta experiencia siendo tan pequeña, y seguiré siendo voluntaria hasta que pueda.

Gracias Lucía Fdez

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