Málaga 2020

Votos de Sor Cristina

En la solemnidad de la Inmaculada Concepción la Provincia España-Sur vivía un acontecimiento importante que añadía colorido a un día ya de por sí muy bonito y festivo, Sor Cristina Sánchez emitía los Votos por primera vez…en medio de estos tiempos de pandemia y de incertidumbre se pone de manifiesta la certeza y la profunda confianza de Sor Cristina en Dios a quién le ratifica su entrega total para servirle en los Pobres…. SIEMPRE.

Desde aquí hacemos eco de las Palabras del Padre Director en su homilía

Querido Juan Antonio, tío de Cristina, P. Claretiano      

Queridas Hermanas: Sor Carmen, Visitadora; Sor Cristina, Consejera de Formación; Sor Regina, Hermana sirviente de Cristina; y todas las que acompañáis a Sor Cristina

Queridos familiares: padres de Cristina, Lola y Juanjo; abuelas, Antonia y María

Amigos todos…

Querida Sor Cristina, con la fuerza y la ilusión del amor de tu vida, ratificas hoy tu entrega al Señor  para servirle en la persona de los pobres, porque has conocido el amor que Dios te tiene y les tiene, y su caridad te urge a dar este paso, para ser consuelo y esperanza, en su nombre, a los pobres, desde esta entrega total a Dios, sin reservas.

Los votos que hoy emites por primera vez son una promesa de libertad y felicidad, porque el que se compromete contigo ¡es el Señor! que cumple sus promesas y te hará muy feliz. Decimos que la libertad es un logro a conseguir cada día, y es verdad, en la medida en que te entregues al amor de tu vida, serás dichosa, te irá bien.

Este es el testimonio profético por el que el Señor acoge hoy la donación que le haces de tu vida: En primer lugar, el Señor te elige para él porque te quiere; en segundo lugar, para que seas luz, para que seas sal, y te dejes trillar como el trigo en el molino, para que convertida en pan, tu vida sea alimento para todos los que tienen hambre y sed en este mundo. El Señor te urge a que les des de comer, pero no olvides que el Señor no se contenta con las migajas, no es suficiente que les des de lo que te sobra; el Señor te ha elegido para que te des en plenitud, en totalidad. Así alcanzarás la libertad y felicidad que ansías y que el Señor hace realidad hoy en tu vida. Desde la fidelidad y entrega lo conseguirás.

Hoy, la Iglesia a través de la Compañía te ofrece este gran regalo: afianzar en tu vida todos los sueños que durante mucho tiempo te han acompañado. Hoy has despertado a una vida nueva, de la que ya has saboreado las primicias. Es verdad, también has experimentado que el camino no es todo llano, y que con facilidad, si no estamos atentos, tropezamos y caemos; unas veces por nuestros descuidos, y otras con “la ayuda” de los que nos acompañan. ¡Así somos! Pero al Señor, que es tu guardián, le pedimos que no permita que resbale tu pie; y que cuando resbales y caigas, sea tu buen samaritano, estrechándote entre sus brazos misericordiosos, consolándote con el bálsamo de su ternura y compasión. 

Los Consejos evangélicos te ayudarán a vivir en fidelidad tu consagración bautismal. Las Hijas de la Caridad hacéis cuatro votos: servicio a los pobres, castidad, pobreza y obediencia. Tú, hoy, los harás por primera vez, como signo del amor, la entrega y generosidad que brota de tu corazón, porque has conocido el amor de Dios, y ya no te perteneces, no puedes vivir para ti. Lo has buscado y lo has encontrado, lo has abrazado y ya no lo puedes soltar. ¡Ya eres para tu amado y tu amado es para ti!

Los Votos que hoy emites, querida Cristina, es un ratificar tu opción por los valores del Reino y un testimonio profético y una alternativa a los valores del mundo, donde el amor, la justicia, la paz y la felicidad se hacen realidad. Para seguir a Cristo evangelizador y servidor de los pobres has sido elegida; por ellos entregas tu vida a Dios. Mirando a los pobres con los ojos de la fe, verás en ellos la imagen de Cristo y los servirás con dulzura, compasión, cordialidad, respeto y devoción.

El mayor escándalo en el mundo hoy, sigue siendo la existencia de tanta pobreza. Ésta es la gran injusticia de nuestro tiempo, que siga muriendo tanta gente en esos corredores de la muerte en que se han convertido los mares, los grandes cementerios, con el único deseo de saciar el hambre.

Teniendo muy presente esta realidad haces voto de pobreza, para vivir, luchar y trabajar con y por los que han perdido todo: la identidad, la dignidad… ¡y cuántos la vida! Porque ellos son, como bien sabes, los que dan sentido a vuestro carisma. Al hacer este voto la Compañía no te pide que vivas en la indigencia; sí te pide, en nombre de los pobres, a los que vas a servir, que tu vida sencilla y sobria, sea un ejemplo de coherencia.

Por amor a los pobres, haces voto de castidad, en esa entrega incondicional a todos los pobres: a los niños explotados y abandonados, a los discapacitados, a las mujeres sexualmente explotadas, a los ancianos indefensos y frágiles, a toda persona rechazada y marginada. La castidad consiste en darte con un corazón grande a toda la humanidad, desde una entrega radical. No te convierte en una persona fría y distante, sino que te ofrece la posibilidad de disfrutar del amor universal que no ata ni limita, creciendo en humanidad desde el amor a todos.

El voto de obediencia es un compromiso que asumes, en fidelidad al Señor, por el bien de los pobres, por los que sacrificas tu propia voluntad, tus propios intereses, tus propios proyectos, adhiriéndote libremente a los sufrimientos de los más débiles. San Vicente relacionaba este voto, sobre todo, con la disponibilidad, en ese ejercicio de responsabilidad que supone estar abiertos y disponibles para ir donde el Señor nos pide, los superiores nos envíen y los pobres nos reclamen.

Que la Virgen Milagrosa, Madre de la Compañía, coincidiendo hoy con este hermoso día de la solemnidad de la Inmaculada Concepción, te sostenga siempre con la misma ilusión y entrega, y cuando te falten las fuerzas, o el ánimo se te venga abajo, acude a ella, y encontrarás el consuelo de una madre que quiere siempre lo mejor para ti.

¡Felicidades sor Cristina!

Nos unimos a la acción de gracias de Sor Cristina en este día tan significativo para ella y le prometemos nuestra oración para que su fidelidad siga creciendo.

 
What do you want to do ?

New mail

Comentario
Accesibilidad