Alhucemas es una peque\u00f1a ciudad que est\u00e1 situada en la parte norte de Marruecos oriental sobre un promontorio rocoso con vistas a su hermosa y extensa bah\u00eda. La parte norte est\u00e1 ocupada por el mar Mediterr\u00e1neo y la cadena del Rit que la aisla de tal modo que para acceder al oeste, este, sur de Marruecos hay que cruzar pasos dif\u00edciles de curvas.<\/p>\n
En la zona rural, las casas carecen de comodidades aunque ahora est\u00e1n mejor desde el terremoto de febrero 2004, ya casi todas tienen luz y la mayor\u00eda agua. Los que carecen de ella tienen que ir a buscarla a pozos cercanos o a r\u00edos. Para ello, suelen utilizar animales de carga.<\/p>\n
La Comunidad del Hospital Mohamed V de Alhucemas naci\u00f3 en el a\u00f1o 1940. En aquellas fechas, hab\u00eda tres Comunidades de Hijas de la Caridad: Hospital Militar, Cruz Roja y Orfanato; todas estas dependientes del Gobierno espa\u00f1ol, ya que en aquellas fechas era Protectorado de Espa\u00f1a.<\/p>\n
Despu\u00e9s de la Independencia, a\u00f1o 1958, fue petici\u00f3n del Gobierno de Marruecos que las hermanas se quedasen sirviendo a los enfermos de este hospital, pasando a ser funcionarias del gobierno.<\/p>\n
La vida a partir de este hecho se torn\u00f3 m\u00e1s dif\u00edcil, las obras sufrieron cambios profundos y fue necesario un discernimiento sobre lo que supon\u00eda vivir en un pa\u00edse extranjero con una religi\u00f3n diferente. \u201cFuimos pasando de una posici\u00f3n de posesi\u00f3n a una posici\u00f3n de inserci\u00f3n y dependencia\u201d (M. Guilleam).<\/p>\n
La Comunidad la formamos hoy d\u00eda cuatro Hermanas. Compartimos la vida y trabajo en el Hospital con los hermanos musulmanes en un servicio de colaboraci\u00f3n y hermandad. De colaboraci\u00f3n, porque saben que siempre pueden contar con nosotros. Y de hermandad, porque no hay amor m\u00e1s grande que dar la vida por los hermanos y nosotras queremos gastar la vida con ilusi\u00f3n y alegr\u00eda renovada desde nuestra condici\u00f3n de Hijas de la Caridad, enviadas por la Compa\u00f1\u00eda.<\/p>\n
Hoy d\u00eda, en el Hospital nos ocupamos del quir\u00f3fano central, cirug\u00eda masculina, cirug\u00eda femenina, pediatr\u00eda y ni\u00f1os abandonados. Adem\u00e1s, atendemos otras necesidades como:<\/p>\n
Otro de los frentes que tenemos es la hemodi\u00e1lisis, cubriendo gastos de los que no pueden pagar las 250 dirhas que cuesta la sesi\u00f3n. Se ayudan a 22 enfermos con sesiones y medicamentos.<\/p>\n
Nuestra expansi\u00f3n comunitaria es s\u00e1bados y domingos, cuando visitamos a los pobres del campo. Este es un nuevo servicio a\u00f1adido a lo que es nuestro servicio de cada d\u00eda.<\/p>\n
\u00bfQu\u00e9 hacemos en Marruecos? Pues como en toda la Compa\u00f1\u00eda, ser presencia de Iglesia, instrumento del amor y bondad de Dios con el pueblo marroqu\u00ed, sirviendo a los hermanos mediante nuestra vivencia de la sencillez, la humildad y la caridad.<\/p>\n
Demostramos con actos sencillos y delicados los signos de amor sin distinci\u00f3n de raza, color ni religi\u00f3n. Un amor universal y gratuito como el buen samaritano.<\/p>\n
Estamos convencidas de lo que el Santo Padre Juan Pablo II nos dijo en su visita a Marruecos:<\/p>\n
\u201cSois aqu\u00ed el cuerpo vivo de Cristo, si quer\u00e9is vivir como aquellos que llevan el nombre de cristianos en este pa\u00eds deb\u00e9is tener mucho amor para servir.<\/p>\n
Trabajad por el bien de todos, trabajad en el respeto a todos. Trabajad sin esperar recompensa, pues el Se\u00f1or a quien serv\u00eds y nuestro Padre del cielo conoce lo que hac\u00e9is. Trabajad en esperanza sin querer ver los resultados de vuestro servicio.<\/p>\n
No cuenta el que planta ni el que riega, s\u00f3lo cuenta el que da crecimiento a la semilla, DIOS\u201d.<\/p>\n