{"id":24221,"date":"2019-10-29T11:07:43","date_gmt":"2019-10-29T11:07:43","guid":{"rendered":"http:\/\/hhccespanasur.org\/?p=24221"},"modified":"2019-10-29T11:07:43","modified_gmt":"2019-10-29T11:07:43","slug":"apertura-del-cincuentenario-del-colegio-virgen-milagrosa","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/hhccespanasur.org\/apertura-del-cincuentenario-del-colegio-virgen-milagrosa\/","title":{"rendered":"Apertura del Cincuentenario del Colegio Virgen Milagrosa"},"content":{"rendered":"

Si hab\u00e9is estado alguna vez en un concierto de m\u00fasica cl\u00e1sica, habr\u00e9is vivido ese momento, para m\u00ed m\u00e1gico, en que cada miembro de la orquesta afina su instrumento o lo prepara para el concierto, otros se van sentando, adaptando sus asientos, preparando sus atriles\u2026 Algunos comentan con los compa\u00f1eros, sonr\u00eden nerviosos o simplemente se concentran. Es, como dec\u00eda antes, m\u00e1gico. Un caos m\u00e1gico que contagia al p\u00fablico, que hace sentir al que espera un cosquilleo de nervios y de emoci\u00f3n, de esa sensaci\u00f3n de que uno est\u00e1 ante un espect\u00e1culo \u00fanico. Luego, tras alg\u00fan carraspeo de advertencia, entra el director de orquesta y el silencio, el orden y la armon\u00eda van dome\u00f1ando al bello caos precedente.<\/span><\/p>\n

Esta fue mi sensaci\u00f3n al entrar al acto de apertura del 50 aniversario del Colegio Virgen Milagrosa de Sevilla. Entre el respetable se encontraban las maestras y profesoras jubiladas o jubilosas, como gustan de llamarse con cari\u00f1o entre ellas; tambi\u00e9n los docentes en activo y personal del colegio en la actualidad; antiguos alumnos y antiguas alumnas de varias generaciones; algunas de estas asist\u00edan, tambi\u00e9n, en calidad de madres; alumnos y alumnas que hoy llenan nuestras aulas, muchos con sus familias;  <\/span>la direcci\u00f3n del AMPA \u201cLa Medalla\u201d y, sobre todo, coloreando de azul el auditorio, las que fueron, son y ser\u00e1n el coraz\u00f3n vivo de este colegio, las Hijas de la Caridad, impregnando del carisma de San Vicente y Santa Luisa el pabell\u00f3n que acog\u00eda tan solemne acto. Todo este selecto grupo de invitados formaba una alegre algarab\u00eda de saludos, sonrisas, an\u00e9cdotas y recuerdos que hicieron que el comienzo del acto se demorase quince minutos. <\/span><\/p>\n

Mientras, en el escenario, Sor Mar\u00eda del Carmen Polo, antigua directora del Centro y actual Visitadora Provincial  <\/span>de las Hijas de la Caridad  <\/span>Espa\u00f1a Sur;  <\/span>Sor Pilar Rend\u00f3n, Directora Titular del Colegio y predecesora de la anterior; Eva Villar, directora pedag\u00f3gica de ESO, bachillerato y ciclos formativos; Ana Mar\u00eda Vergara, directora pedag\u00f3gica de primaria e In\u00e9s Moreno, profesora del centro y presentadora del acto, preparaban sus papeles, como si de la afinaci\u00f3n de instrumentos se tratase y comentaban entre ellas, mientras dirig\u00edan miradas al alborotado p\u00fablico, hasta que apareci\u00f3 la esperada directora de la orquesta, M\u00aa de los \u00c1ngeles Repetto (nuestra querida Lala) y se hizo el silencio y comenz\u00f3 el concierto.<\/span><\/p>\n

La sinfon\u00eda fue maravillosa. In\u00e9s, la sutil conductora, dio paso a Lala, primera directora y fundadora del Centro Virgen Milagrosa en el a\u00f1o 1969, que, desde el principio, coloc\u00f3 a Nuestra Madre Milagrosa al frente del evento. Pronto se arrancaron los primeros aplausos, fruto de la emoci\u00f3n al recordar a Sor Benicia, la hermana que ide\u00f3 el colegio y puso a Lala al frente, con dos objetivos fundamentales: propagar la devoci\u00f3n a la Virgen y formar \u201cal pueblo\u201d.<\/span><\/p>\n

Tras este comienzo prometedor, Irene Alc\u00e1ntara, profesora del colegio, present\u00f3 el logotipo del 50 aniversario. En su dise\u00f1o, destaca el consabido y caracter\u00edstico color azul, aparece metaf\u00f3ricamente la libertad, que nos acompa\u00f1ar\u00e1 este a\u00f1o como valor, simbolizada en la mancha imprecisa y creativa de acuarela y las manos que todos remitimos, sin dudar, a las de nuestra querida Virgen Milagrosa. Ella, desde encima del escenario, derramaba favores para todos los presentes. El logotipo, que presid\u00eda el fondo del escenario, estaba flanqueado por San Vicente y Santa Luisa. <\/span><\/p>\n

Si Lala nos hab\u00eda hecho recordar el pasado con nostalgia y cari\u00f1o, pronto nuestras miradas se dirigieron hacia el futuro, cuando, tras la presentaci\u00f3n del logo, dos alumnos de primero de secundaria, casi de puntillas para llegar al atril, explicaron con la sencillez propia de los ni\u00f1os, la mascota que los alumnos del colegio han creado para el evento, Lapic\u00edn. <\/span><\/p>\n

Los sonidos acompasados de la orquesta se iban sucediendo. La sinfon\u00eda cada vez era m\u00e1s armoniosa, con gusto y deleite nos iban llevando de melod\u00eda en melod\u00eda y, as\u00ed, fluyendo como fluye el agua, Sor Pilar Rend\u00f3n nos present\u00f3 el lema \u201ccincuenta a\u00f1os sembrando ilusiones\u201d y nos record\u00f3 que la siembra requiere de la espera paciente y de la fe, valores que debemos cultivar en este nuevo tiempo de prisas e inmediatez. Nos habl\u00f3 de Lala y Sor Benicia, las primeras sembradoras, de los so\u00f1adores y cultivadores de esas semillas y del \u00e1rbol, hoy maduro, que sigue dando frutos. Cerr\u00f3 la primera parte de su discurso con unas bellas palabras del Papa Francisco alabando la alegr\u00eda, el coraje y la tenacidad en el anuncio y la capacidad de resistencia activa; la elecci\u00f3n, nada casual, de esta cita lanzaba una mirada al futuro, en un discurso cargado de nostalgia y abr\u00eda, en una segunda parte, una puerta a los desaf\u00edos de los nuevos tiempos, a la integraci\u00f3n social, con un claro gui\u00f1o a la interculturalidad que hoy es se\u00f1al caracter\u00edstica de nuestro colegio, a la formaci\u00f3n continua para el mejor servicio (saber m\u00e1s\u2026<\/i>) y a la apertura a la trascendencia. Se permiti\u00f3, la Directora titular, corregir brillantemente a Jorge Manrique para terminar con la presentaci\u00f3n: <<Lo mejor est\u00e1 por venir>><\/i>.<\/span><\/p>\n

Sor M\u00aa del Carmen Polo es antigua alumna del centro, fue profesora y directora titular y pedag\u00f3gica del mismo, y en esta ocasi\u00f3n ven\u00eda para inaugurar este acontecimiento como Visitadora de las Hijas de la Caridad. La sencillez y la claridad configuraron la melod\u00eda que le toc\u00f3 interpretar, su discurso vers\u00f3 sobre la vida, la vida en plenitud. Agradeci\u00f3 al equipo que ha formado parte de la historia del colegio durante 50 a\u00f1os, a las familias que depositaron y depositan su confianza y puso el acento en el alumnado que entrelaza su vida con la vida del colegio. <\/span><\/p>\n

Lleg\u00f3 el turno de Eva Villar que realiz\u00f3, de manera elegante, sencilla y natural, una semblanza de la pregonera. En esta presentaci\u00f3n resalt\u00f3 la dulzura, esp\u00edritu de servicio, cercan\u00eda, respeto, humildad, serenidad y valent\u00eda de la encargada de abrir el a\u00f1o del 50 aniversario y, sobre todo, el v\u00ednculo que cre\u00f3 con el colegio en el que entr\u00f3 en edad de p\u00e1rvulos y se form\u00f3 como alumna, creci\u00f3 en su vida espiritual como miembro de JMV y en el que hoy ejerce una labor de dedicaci\u00f3n y servicio como docente. Termin\u00f3 citando un certero discurso que el Papa Francisco dedic\u00f3 a los educadores en el que habla de las tres lenguas: la de la mente, la del coraz\u00f3n y la de las manos; ajustado perfectamente a la labor de M\u00aa Dolores Gonz\u00e1lez, Loli.<\/span><\/p>\n

Por fin apareci\u00f3 Loli, la pregonera, serena, firme y sencilla. Iba a interpretar el solo del concierto que todos est\u00e1bamos esperando y no defraud\u00f3. A la salida una hermana comentaba: \u201cel preg\u00f3n ha sido como es ella\u201d<\/i>, no se me ocurre mejor manera de resumirlo. Su coraz\u00f3n estaba en ese preg\u00f3n, su colegio era ese preg\u00f3n, ni el colegio pod\u00eda tener mejor pregonera ni la pregonera pod\u00eda tener mejor colegio; ambos estaban fundidos, ambos eran una armon\u00eda perfecta de la que disfrutamos todos, flotando por encima del tiempo. La m\u00fasica nos hab\u00eda cautivado y el concierto nos hizo dejarnos llevar. Comenz\u00f3 en el origen de los tiempos y puso a Cristo en el centro del relato. Nos llev\u00f3 suavemente hasta la \u00e9poca de San Vicente, de Santa Luisa, sin darnos cuenta nos transport\u00f3 junto a Santa Catalina de Labour\u00e9 para irnos acercando poco a poco a Sevilla, a la llegada de las Hijas de la Caridad a la ciudad, hace ya 131 a\u00f1os y, de pronto, nos vimos en 1969, un 13 de septiembre y un colegio que abr\u00eda sus puertas. <\/span><\/p>\n

Apareci\u00f3 la literatura, Machado, \u201cMi infancia son recuerdos\u2026\u201d y llen\u00f3 de nostalgia y recuerdos a un auditorio completamente embelesado, reescribiendo el poema del insigne poeta. Nos cuenta que no quer\u00eda hacer un preg\u00f3n lleno de fechas, pero no puede evitar recordar algunas y en medio, una alusi\u00f3n al Padre Ruiz, que arranca sonrisas, murmullos y aplausos t\u00edmidos y emocionados. Tampoco quiere que su preg\u00f3n sea un recorrido por los cambios que ha experimentado el colegio, como si de un ni\u00f1o que crece se tratase, pero sigue sin poder evitar recordar el puesto de Lola, el rinc\u00f3n de Jose, los patios cubiertos, la biblioteca de Sor Adelaida, la capilla e incluso la piscina que nunca existi\u00f3, salvo en la mente de todos los que han sido y son alumnos; entre el p\u00fablico se escuchan susurros de a\u00f1oranza y alguna l\u00e1grima se asoma a m\u00e1s de una mejilla. <\/span><\/p>\n

Tiene, incluso, un hueco en su relato para reclamar, con una sutil iron\u00eda y un humor exquisito, un pacto por la educaci\u00f3n y una mirada justa a la ense\u00f1anza concertada. <\/span><\/p>\n

Ya, a estas alturas, la melod\u00eda nos tiene atrapados, y Loli, nos advierte que su preg\u00f3n no es una lista de personas vinculadas al colegio, aunque eso no le impide recordar a Sor Benicia, a Lala, a Sor M\u00aa Josefa\u2026 con un cari\u00f1o especial que se va derramando por sus palabras.<\/span><\/p>\n

Poco a poco nos ha llevado, casi sin que lo notemos, a lo que quiere. Quiere mostrarnos lo que ha sido el colegio y lo que ser\u00e1 y nos habla de los alumnos y las alumnas y lo que se llevan del colegio. Luego, de manera muy emotiva, nos sumerge de nuevo en la armon\u00eda recordando \u201cT\u00fa, me ense\u00f1aste a volar\u201d y de nuevo nace la emoci\u00f3n cuando recuerda a las maestras y a los maestros. Dice el diccionario que estos son las personas de las que se reciben ense\u00f1anzas muy valiosas y Loli, haciendo justicia, incluye aqu\u00ed, tanto a los que est\u00e1n en las clases con los alumnos, como a todos los que hacen que el colegio funcione desde la porter\u00eda hasta la limpieza.<\/span><\/p>\n

Lo que ha sido, lo que es y lo que ser\u00e1 este colegio no se entiende sin las Hijas de la Caridad. Por eso en su preg\u00f3n la mayor alabanza es para ellas. No puedo dejar de resaltar que uno de los momentos que m\u00e1s encogi\u00f3 el coraz\u00f3n de los presentes fue el recuerdo a Sor Sof\u00eda; justo detr\u00e1s de donde me encontraba alguien susurr\u00f3 sevillanamente \u201c\u00a1Qu\u00e9 bonito lo est\u00e1 haciendo!\u201d<\/i> <\/span><\/p>\n

Y nos habl\u00f3 de compartir, del futuro, de los laicos, de las jubilosas y de lo que nos ense\u00f1aron, de las familias y nos dej\u00f3 una frase grabada, que a los que nos movemos cerca del colegio nos servir\u00e1 a buen seguro: \u201cLa calidad es nuestra caridad\u201d<\/i> y, por supuesto, concluy\u00f3 con \u201cLa Milagrosa\u201d que est\u00e1 en todas partes, de todas las formas posibles.<\/span><\/p>\n

Termin\u00f3 el concierto. Termin\u00f3 el preg\u00f3n y el auditorio en pie ovacionaba la obra, porque como escuch\u00e9 al salir \u201cel preg\u00f3n fue como es ella\u201d<\/i>;  <\/span>y no se me ocurre mejor manera de resumirlo.<\/span><\/p>\n

Al final Ana Mar\u00eda, la directora de primaria, fue la encargada de agradecer a la pregonera el regalo que nos hizo, poniendo palabras al sentir general. <\/span><\/p>\n

Para que la met\u00e1fora que he usado a lo largo de esta cr\u00f3nica fuese completa no he necesitado hacer ning\u00fan giro forzado. Me explico: es habitual en los conciertos que, al final, alguien entregue al director un ramo de flores y en nuestro concierto, la sorpresa final fue que las Hijas de la Caridad regalaron a Lala, la incombustible, una azulejo de reconocimiento, justo en la puerta de la capilla. El lugar m\u00e1s importante de nuestro colegio. Digno y merecido ramo de flores para una digna e incombustible directora de orquesta.<\/span><\/p>\n

Salvador Villa.<\/span><\/p>\n