{"id":23944,"date":"2019-09-09T12:31:07","date_gmt":"2019-09-09T12:31:07","guid":{"rendered":"http:\/\/hhccespanasur.org\/?p=23944"},"modified":"2019-09-09T12:31:07","modified_gmt":"2019-09-09T12:31:07","slug":"una-aventura-cien-cien-enriquecedora","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/hhccespanasur.org\/una-aventura-cien-cien-enriquecedora\/","title":{"rendered":"Una aventura cien por cien enriquecedora"},"content":{"rendered":"

La verdad es que me embarqu\u00e9 en esta aventura un poco a ciegas. Nunca hab\u00eda puesto un pie en Marruecos, y tampoco hab\u00eda conocido a una Hija de la Caridad en mi vida. Pero de lo \u00fanico  <\/span>que estaba segura era  <\/span>que ten\u00eda unas ganas infinitas de aprender, de darme a los dem\u00e1s y salir de mi rutina c\u00f3moda para conocer una realidad radicalmente distinta. Me anim\u00e9 a escribir una carta cuando vi la noticia de que el Papa Francisco hab\u00eda visitado una comunidad de las Hijas de la Caridad en Temara. Despu\u00e9s de informarme acerca de la historia y la espiritualidad de la Compa\u00f1\u00eda, decid\u00ed enviar un email que -sinceramente- nunca pens\u00e9 que ser\u00eda contestado. Todo lo contrario, desde el primer momento se me dieron much\u00edsimas facilidades y mi solicitud fue aprobada con una rapidez incre\u00edble. A partir de ese momento fue cuando comenc\u00e9 a asumir que en un par de semanas iba a vivir una de las experiencias m\u00e1s enriquecedoras de mi vida.<\/span><\/p>\n

Y es que, si tuviera que definir mi estancia en Marruecos con una sola palabra ser\u00eda, sin lugar a dudas, enriquecimiento -en todos los sentidos-. En primer lugar, enriquecimiento cultural. En Nador he tenido la oportunidad de sumergirme en una sociedad y una cultura totalmente distinta a la que estoy acostumbrada en mi vida de universitaria en Pamplona. Desde la comida, los ritos religiosos y la vestimenta de la gente, hasta cada uno de los peque\u00f1os detalles que conforman el d\u00eda a d\u00eda de la vida en Marruecos; todo ha sido nuevo para m\u00ed, y aunque tuviera una ligera idea preconcebida de los rasgos m\u00e1s caracter\u00edsticos de esta cultura, hay que vivirlo para conocerlo de verdad. Por otra parte, ha sido una suerte incre\u00edble para m\u00ed, como estudiante de Relaciones Internacionales, haber tenido la oportunidad de ver tan de cerca toda la problem\u00e1tica con respecto a las fronteras y la inmigraci\u00f3n. Es un tema de especial relevancia en la actualidad y del que muchas veces solo se muestra una parte, pero tras este viaje me ha quedado claro que hay un mucho por hacer y que no podemos quedarnos callados ante tanto sufrimiento.<\/span><\/p>\n

En segundo lugar, ha sido una experiencia incre\u00edblemente enriquecedora a nivel humano. Desde el primer momento me sent\u00ed totalmente acogida, segura y cuidada por la maravillosa comunidad de HHCC de Nador. He podido conocer la labor y el d\u00eda a d\u00eda de tres hermanas que dedican cada minuto de sus vidas al servicio y la entrega a los m\u00e1s necesitados… y lo m\u00e1s impactante: sin pedir absolutamente nada a cambio. Me hab\u00edan hablado muchas veces acerca de eso de “ser Cristo en la tierra”, pero lo he logrado ver de verdad cuando he conocido a Sor Carmen Aurelia, Sor Isabel y Sor Trini. Adem\u00e1s, tuve la suerte de ser acompa\u00f1ada en esta experiencia por Sor Cristina, que fue para m\u00ed desde el momento en el que me recogi\u00f3 en el aeropuerto de Melilla como una hermana mayor de la he aprendido tambi\u00e9n much\u00edsimo. Todas han sido para m\u00ed ejemplos constantes de generosidad, esp\u00edritu de servicio, alegr\u00eda y desprendimiento. No puedo estar m\u00e1s agradecida.<\/span><\/p>\n

Finalmente, esta experiencia ha sido tambi\u00e9n de un profundo enriquecimiento espiritual. Durante los 20 d\u00edas que he pasado en Nador, y ante la visi\u00f3n de personas tan necesitadas, he podido descubrir a Cristo en cada uno de los rostros que ped\u00edan una mano amiga. Ancianos, ni\u00f1os, personas con discapacidad… todas y cada una de las personas que he conocido me acercaban a Cristo y me ayudaban a fortalecer mi fe y mi oraci\u00f3n. Aunque no me los puedo llevar conmigo a Pamplona, rezo por todos a diario y los tengo muy presentes en mi d\u00eda a d\u00eda, por muy distintas que sean nuestras vidas.<\/span><\/p>\n

Por todo esto, solo puedo dar gracias -a Dios y a las HHCC, especialmente a la provincia de Espa\u00f1a Sur- por haberme dado esta oportunidad, de nuevo sin pedir nada a cambio y prestando todo tipo de facilidades desde el principio. Cuentan con mi oraci\u00f3n diaria y con la difusi\u00f3n que pueda dar de su labor y su espiritualidad en la universidad y entre mis amigas. <\/span><\/p>\n

\u00a1Much\u00edsimas gracias!<\/span><\/p>\n

Pilar de Moya<\/i><\/b><\/span><\/p>\n