El \u00faltimo en coger el boomerang fue Jos\u00e9 Luis, responsable de dirigir la din\u00e1mica de la ma\u00f1ana.<\/p>\n
Se inicia con la apertura de la proyecci\u00f3n y explicaci\u00f3n del mito \u201cQuir\u00f3n, el sanador herido\u201d<\/strong>.<\/p>\n Quir\u00f3n nos ense\u00f1a a abrazar la herida y aprender de ella, para desarrollar nuestras capacidades, la compasi\u00f3n y sabidur\u00eda para as\u00ed poder ayudar a los que nos rodean.<\/p>\n Nos invita a identificar las actitudes, gestos\u2026 que podemos hacer por los dem\u00e1s, y que no somos capaces de hacer por nosotros mismos. Y esforzarnos por saber ponerlos en la situaci\u00f3n del Yo y no proyectarlos sobre los dem\u00e1s: El herido, El heridor y El sanador o Salvador.<\/strong><\/p>\n Lo que para la mitolog\u00eda griega era Quir\u00f3n, para nosotros los cristianos es la persona de Jesucristo.<\/p>\n Tras un breve descanso, con refrigerio incluido, continuamos trabajando juntos, en esta ocasi\u00f3n extrapolando a nuestras vidas la t\u00e9cnica japonesa conocida como Kintsugi, que consiste en reparar lo que se rompe, con tanta delicadeza y con materiales tan preciosos, como el oro, que los objetos reparados triplican su valor; de esta forma, las dificultades que sufrimos en nuestras vidas, los golpes que nos rompen por dentro pueden dotarnos de m\u00e1s valor si los curamos tomando conciencia de que no quedar\u00e1 igual que antes, sino con mayor valor, fortaleciendo la zona rota, de forma que no vuelva a quebrarse por el mismo sitio.<\/p>\n Por la tarde, mientras unos fueron a la playa, otros, con la ayuda inestimable de Juan e Israel, monitores del Hogar Marillac, pudieron poner en pr\u00e1ctica esta t\u00e9cnica, con mejores o peores resultados, pero lo importante no era c\u00f3mo quedaran las reconstrucciones sino que fueran conscientes del esfuerzo que requiere, que es m\u00e1s f\u00e1cil con ayuda, que algo roto a\u00fan puede hacerte m\u00e1s da\u00f1o, porque si no lo manipulas con cuidado puedes cortarte, y que, aunque creamos que las herramientas que tenemos no son las mejores, no podemos dejar de intentarlo.<\/p>\n La noche pintaba bien: tuvimos la oportunidad de mostrar nuestro desparpajo al micr\u00f3fono gracias al karaoke que estaba preparado. Lo que no esper\u00e1bamos es que la fiesta no quedar\u00eda ah\u00ed, sino que tras unos cuantos valientes, el centro de la pista se llen\u00f3 de alegres y desvergonzados bailarines que, sinti\u00e9ndose en familia, disfrutaron de canciones de ayer y hoy elegidas por Conchi, voluntaria de los pisos de autonom\u00eda del Hogar Marillac.<\/p>\n Al terminar este d\u00eda, tuvimos unos momentos de recogimiento en clima de silencio. Dando gracias a Dios por todo lo recibido y por la ternura que hab\u00eda tenido con cada uno de nosotros. Gracias, Se\u00f1or, por tu protecci\u00f3n y amistad; por las personas que pones a nuestro lado, por el bien que nos hacen y por el bien que hacemos a los dem\u00e1s. Recu\u00e9rdanos, que si alguna vez ocasionamos alguna herida<\/strong>, siempre estamos a tiempo de curar<\/strong>.<\/p>\n
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