Hijas de la Caridad España-Sur > Noticias > Enseñanza > El contenedor ya va navegando rumbo a Madagascar
Colegio Luisa de Marillac

El contenedor ya va navegando rumbo a Madagascar

Con tanta ilusión se lleva a cabo este trabajo, que el cansancio, el esfuerzo se convierten en alegría y satisfacción.

Todos estamos implicados: Comunidad del Colegio, profesorado, alumnos, familias, amigos, Cáritas…Colaborador destacado es D.Rafael Gómez, Consignatario de buques. Él ha hecho todas las gestiones, solucionado la documentación, para poder conseguir el contenedor. Es una persona generosa, entregada, que va allanando cuantos problemas puedan aparecer. Gracias a él lo difícil resulta fácil. Esta es la razón de que las cosas vayan saliendo tan bien. 

Este Proyecto de Ayuda a Madagascar, ya de mucha tradición, nos impulsa a estar atentos a las necesidades de esta preciosa MISIÓN. Y en función de su necesidad, buscar ayuda acá y allá, acudir a unos y a otros. Y es que aunque lejana en el espacio físico, la llevamos en el corazón.

El contenedor tenía que salir ¡y salió!, el 30 de junio, por eso tuvimos que poner manos a la obra, aunque estábamos ya a final de curso con todo el trabajo extra de esas fechas, para que todo estuviera listo. Y, mirad cómo va el contenedor, ¡¡que parece una obra de exposición!! “Así tendría que tener yo mi habitación”- decía más de un niño al ver tanto orden.

Todo esto me lleva a dar continuas gracias a Dios, y a todos los que colaboráis en este proyecto; sin vuestra ayuda y generosidad no sería posible. Es un proyecto que necesita de mucha colaboración, económica y, especialmente, humana… Esto me hace feliz y, aunque me considero insignificante en este pequeño pero necesario proyecto, al mismo tiempo me siento privilegiada de poder llevarlo a cabo. Son muchos pobres los que se van a beneficiar de ello, y esto nos hace responsables de que esta OBRA llegue a buen puerto, como llegará, con la protección de Dios, el CONTENEDOR a MADAGASCAR.

Somos granitos de arena en una gran playa y sin todos y cada uno de nosotros no sería posible. 

Un fuerte abrazo y que el Señor sea nuestra mejor recompensa. 

Sor Emilia Pérez.HC

Comentario
Accesibilidad